Páginas

viernes, 30 de agosto de 2013

Código de honor


Nunca abandones a un compañero en necesidad,
en peligro o en apuro.
Nunca retires tu lealtad una vez otorgada.

Nunca abandones a un grupo al que debes tu apoyo.
Nunca te menosprecies ni minimices tu fuerza o tu poder.
Nunca necesites elogio, aprobación o compasión.
Nunca comprometas tu propia realidad.
Nunca permitas que tu afinidad se degrade.

No des o recibas comunicación a menos que tú mismo lo desees.
Tu autodeterminismo y tu honor son más importantes
que tu vida inmediata.

La integridad hacia ti mismo es más importante que tu cuerpo.
Nunca lamentes el ayer. La vida está en ti hoy,
y tu haces tu mañana.

Nunca temas dañar a otro en una causa justa.
No desees agradar o ser admirado.
Sé tu propio consejero, sigue tus propios consejos
y selecciona tus propias decisiones.
Sé fiel a tus propias metas.
Foto: Código de honor


Nunca abandones a un compañero en necesidad,
en peligro o en apuro.
Nunca retires tu lealtad una vez otorgada.
Nunca abandones a un grupo al que debes tu apoyo.
Nunca te menosprecies ni minimices tu fuerza o tu poder.
Nunca necesites elogio, aprobación o compasión.
Nunca comprometas tu propia realidad.
Nunca permitas que tu afinidad se degrade.

No des o recibas comunicación a menos que tú mismo lo desees.
Tu autodeterminismo y tu honor son más importantes
que tu vida inmediata.
La integridad hacia ti mismo es más importante que tu cuerpo.
Nunca lamentes el ayer. La vida está en ti hoy,
y tu haces tu mañana.
Nunca temas dañar a otro en una causa justa.
No desees agradar o ser admirado.
Sé tu propio consejero, sigue tus propios consejos
y selecciona tus propias decisiones.
Sé fiel a tus propias metas.
L. R. Hubbard

No hay comentarios:

Publicar un comentario