El salsero Alex Matos sigue sumando éxito a su carrera y en esta oportunidad lo hace por medio de una gira de promoción que acaba de realizar por los programas más importantes de Estados Unidos. Matos, llamado también “El salsero de ahora”, luego de acabar una gira de casi dos meses en ese país donde tuvo más de 30 presentaciones a casa llena, se detuvo y visitó programas tan importantes como “Sábado Gigante” y el del famoso escritor y presentador de televisión Jaime Bayly. Además, participó en “Levántate”, “La Batanga” y “Buenos días Miami” de Telemundo, entre otros programas.
¿Soltera?, ¡sí! “No todas
las personas nacieron para casarse”
La prioridad. La mujer busca la realización personal en su carrera y en su
economía
Cuando una mujer adulta joven no tiene compromiso para casarse,
generalmente en una edad que supere los 25 años, tiende a recibir mucha presión
social no sólo externa, sino también a lo interno del seno familiar.
Y es que existe una creencia casi generalizada de que una mujer sola, sin una vida con pareja en convivencia, no puede de ninguna manera tener una vida plena, esto quizás se deba a que queda lastre de una sociedad de cultura machista.
Culturas. Esta situación ocurre mayormente en los países latinoamericanos, sudamericanos o en desarrollo, en los que aún persiste la idea o creencia de que la mujer debe “realizarse” (casarse y tener hijos) antes de cumplir los 30 años, lo que no es igual en Norteamérica y Europa.
Sin embargo, cada vez más esta creencia va quedando en el pasado y, en países como el nuestro -República Dominicana- por ejemplo, ya la mujer retrasa mucho más el tiempo para asumir el serio compromiso de casarse y tener hijos, la mayoría de las veces por una decisión propia, dando prioridad a otras metas de su vida como son su preparación académica profesional-laboral, o porque las propuestas en el mercado afectivo no le convencen del todo y prefiere estar sola disfrutando de su autonomía.
A propósito de este tema conversamos con la psicóloga y terapeuta familiar Evelyn Soraya Lara de Mármol. Esta especialista nos indica que la soltería hay que considerarla de acuerdo al estatus de la misma.
“En el caso de las mujeres habría que considerar el estatus de la soledad, si está sola, sin pareja, con pareja sin convivencia bajo el mismo techo, divorciada, viuda, o sola por elección”.
La experta agrega que lo que la sociedad muchas veces podría ver como una soledad, es posible que no se trate de un sentimiento de soledad, sino que se trate de una decisión de la mujer de quedarse sola para mantener y disfrutar de su autonomía ganada.
Libertad. Lara de Mármol precisa que actualmente mujeres que han tenido experiencias de relaciones, las terminan, para aprenden a gozar de su autonomía, “prefiriendo muchas veces aislarse para no perder lo ganado”.
En sus respuestas la psicóloga cita y pone de ejemplo a escritora Marie-France Hirigoyen, quien dice en su libro “Las nuevas soledades” que “en una sociedad que pregona el individualismo, la realización de uno mismo y del bienestar personal, hace que cada vez más mujeres heterosexuales se nieguen a sacrificar su independencia a cambio de la supuesta comodidad de una vida de pareja”.
Y es que existe una creencia casi generalizada de que una mujer sola, sin una vida con pareja en convivencia, no puede de ninguna manera tener una vida plena, esto quizás se deba a que queda lastre de una sociedad de cultura machista.
Culturas. Esta situación ocurre mayormente en los países latinoamericanos, sudamericanos o en desarrollo, en los que aún persiste la idea o creencia de que la mujer debe “realizarse” (casarse y tener hijos) antes de cumplir los 30 años, lo que no es igual en Norteamérica y Europa.
Sin embargo, cada vez más esta creencia va quedando en el pasado y, en países como el nuestro -República Dominicana- por ejemplo, ya la mujer retrasa mucho más el tiempo para asumir el serio compromiso de casarse y tener hijos, la mayoría de las veces por una decisión propia, dando prioridad a otras metas de su vida como son su preparación académica profesional-laboral, o porque las propuestas en el mercado afectivo no le convencen del todo y prefiere estar sola disfrutando de su autonomía.
A propósito de este tema conversamos con la psicóloga y terapeuta familiar Evelyn Soraya Lara de Mármol. Esta especialista nos indica que la soltería hay que considerarla de acuerdo al estatus de la misma.
“En el caso de las mujeres habría que considerar el estatus de la soledad, si está sola, sin pareja, con pareja sin convivencia bajo el mismo techo, divorciada, viuda, o sola por elección”.
La experta agrega que lo que la sociedad muchas veces podría ver como una soledad, es posible que no se trate de un sentimiento de soledad, sino que se trate de una decisión de la mujer de quedarse sola para mantener y disfrutar de su autonomía ganada.
Libertad. Lara de Mármol precisa que actualmente mujeres que han tenido experiencias de relaciones, las terminan, para aprenden a gozar de su autonomía, “prefiriendo muchas veces aislarse para no perder lo ganado”.
En sus respuestas la psicóloga cita y pone de ejemplo a escritora Marie-France Hirigoyen, quien dice en su libro “Las nuevas soledades” que “en una sociedad que pregona el individualismo, la realización de uno mismo y del bienestar personal, hace que cada vez más mujeres heterosexuales se nieguen a sacrificar su independencia a cambio de la supuesta comodidad de una vida de pareja”.