Orar por otros
Veo el Cristo en ti.
Visualizo a las personas por quienes oro sanas, prósperas y satisfechas. Las reconozco como las creaciones de Dios que son realmente, bendecidas con sabiduría, fortaleza, vida y energía inherentes.
En vez de enfocar mi atención en apariencias, me concentro en afirmar la verdad de su ser. No importa la necesidad, elevo mis pensamientos a una visión de perfección espiritual y bien absoluto. Al orar por curación, afirmo salud. Por prosperidad, afirmo abundancia. Por guía, reconozco el resplandor y la claridad de la luz de Dios.
Pongo mi fe en el Poder crítico activo en toda persona. Partiendo de una base de fe, oro, doy gracias por oración contestada y pongo el resultado en manos de Dios.
Deseo que seas prosperado en todo, y que tengas salud, a la vez que tu alma prospera.—3 Juan 1:2
Bendiciones,