NADIE SUFRE POR AMOR.
Se sufre por otras cosas, por añoranza, porque queremos recibir lo mismo que damos, porque nos creemos que podemos cambiar a las personas, porque sentimos que el otro es nuestra propiedad etc,
entonces ya no es amor incondicional, es amor con condiciones. Se sufre por las carencias afectivas y por las heridas emocionales.
No se sufre por ser feliz.
En las relaciones amorosas dos personas se unen durante un tiempo determinado para compartir vivencias y situaciones emocionales y después siguen su camino evolutivo en solitario o con otras personas, así que cuando una relación se termina,
En las relaciones amorosas dos personas se unen durante un tiempo determinado para compartir vivencias y situaciones emocionales y después siguen su camino evolutivo en solitario o con otras personas, así que cuando una relación se termina,
es normal sentir ciertas emociones por el fracaso de la misma relación, por las ilusiones que se pusieron, por todo lo que se creó conjuntamente etc,
pero si se comprende, si se entiende que esa o esas personas con las que compartimos penas y alegrías nos hicieron
ver claras las cosas importantes para con nosotros, y si ambas aprendieron lo que tenían que aprender, esa o esas relaciones no fueron un fracaso, sino todo un éxito.
Si tuviste una pareja y las cosas no funcionaron, si ahora la tienes y tampoco va bien la relación y parece que no puedes convivir o tener un vínculo estable, tienes que recordar que
“todo tiene un por qué”.
El universo siempre pone ante nosotros una nueva oportunidad para aprender la asignatura del AMOR.
[LUHEMA]
[LUHEMA]