Dios mío, creo que al invocarte te haces presente en mi oración. Tengo la certeza que quieres concederme este momento de oración para llenarme de tu gracia, para que crea y mire al futuro con confianza, para poder amar más generosamente.
Dios mío, Tú eres mi Padre amoroso que anhelas que experimente la auténtica paz y felicidad al dejarte ser el centro de mi vida interior. Guía mi meditación para que me aleje de las preocupaciones exteriores y pasajeras y pueda ser dócil a tus inspiraciones.
Señor, creo, confío y te amo sobre todas las cosas. Me acerco a Ti en esta oración para que con tus Palabras reanimes mi fe, renueves la energía espiritual que mueve mi corazón, que me mantenga en vigilante espera y con el entusiasmo de animar siempre a mi prójimo.
Concédeme vivir alerta, de cara a la eternidad, con mi alma limpia, lista para el encuentro definitivo contigo.
Amén
— Dios mío, Tú eres mi Padre amoroso que anhelas que experimente la auténtica paz y felicidad al dejarte ser el centro de mi vida interior. Guía mi meditación para que me aleje de las preocupaciones exteriores y pasajeras y pueda ser dócil a tus inspiraciones.
Señor, creo, confío y te amo sobre todas las cosas. Me acerco a Ti en esta oración para que con tus Palabras reanimes mi fe, renueves la energía espiritual que mueve mi corazón, que me mantenga en vigilante espera y con el entusiasmo de animar siempre a mi prójimo.
Concédeme vivir alerta, de cara a la eternidad, con mi alma limpia, lista para el encuentro definitivo contigo.
Amén