LA PALABRA
Curación
Soy saludable en mente, cuerpo y espíritu.
La buena salud es importante para mí. Deseo sentir, hacer y ser lo mejor mental, física y espiritualmente. Una clave para mi salud es orar. En momentos callados de comunión con Dios, estoy receptivo a la sabiduría, el poder y la inspiración.
Visualizo la vida de Dios en mí como células saludables, pensamientos creativos y energía vital. La vida de Dios anima y regenera mi cuerpo, mente y espíritu. Es la fuerza de vida que me mantiene fuerte.
Si surge un reto de salud, lo supero con fe y comprensión. La alimentación apropiada, el descanso y la oración diaria son parte de mi plan de salud. Confío en el espíritu de Dios en mí para que me guíe a las acciones correctas y a una salud óptima.
¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros?—1 Corintios 6:19
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