Bendita sea toda mujer del mundo

Una mujer tiene abiertos
los ojos a la belleza,
a quien domina el entusiasmo
y ama intensamente la vida;
para ella cada día

es un regalo inapreciable

que hay que vivir plenamente,
aceptando el dolor y la alegría
con igual serenidad.

Una mujer no tiene miedo de amar
ni se envanece porque es amada;
goza el minuto como si fuera el último,

no vive esperando el mañana
porque tal vez nunca llegue.
Cuando encuentres a ésta mujer,
¡ ámala intensamente !

Una mujer se respeta a sí misma,
porque así sabe respetar a los demás;

y no recurre a la burla ni a la ofensa,
porque sabe que más rebajan
a quien las hace que a quien las recibe.